En un espacio de aproximadamente 1,90 x 1,90 metros del Centro de Privación Provisional de Libertad (CPPL) de El Inca, en el norte de Quito, fue ubicado desde este miércoles Daniel Salcedo, pieza clave en la investigación de al menos cuatro delitos relacionados con actos de corrupción en la venta de insumos médicos a hospitales de la red pública de salud en Guayaquil.

Salcedo ingresó al Centro de El Inca poco antes de las 23:00 del martes, luego de más de siete horas de viaje por vía terrestre desde Guayaquil y tres chequeos médicos previos. Un gran número de agentes policiales de diversas unidades participó no solo del operativo de seguridad afuera del centro carcelario, sino también en el recibimiento del detenido en el hospital de la Policía Quito número 1.

Poco antes de la llegada de Salcedo a esa casa de salud, el coronel Xavier Buitrón, director general del hospital de la Policía, explicaba que le realizarían al detenido una revisión médica para corroborar los informes médicos enviados desde el hospital Guayaquil, donde permaneció el procesado por 48 días, y desde Santo Domingo de los Colorados, lugar en el que tuvo que desviarse la caravana en que iba Salcedo para tomar la vía de San Miguel de los Bancos para llegar hasta Quito.

Dos horas de revisión después, Buitrón señalaba que se corroboró médicamente que las condiciones de salud eran las adecuadas para que Salcedo sea trasladado. Aun así, reconocía que el detenido presentó dolores en la pierna izquierda producto de un injerto de piel que tenía. Los médicos hicieron exámenes y le proporcionaron medicina para contrarrestar la infección detectada.

Daniel Salcedo luego de bajar con ayuda de la ambulancia en el CPPL de El Inca ingresó en el policlínico de la cárcel.

Ahí permaneció hasta este miércoles en la mañana que fue llevado, también con la ayuda de privados de libertad, al lugar acondicionado en la parte posterior del área administrativa del centro en el que permanecerá aislado del resto de la población penitenciaria, para así precautelar su integridad física y médica.

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Conscientes del papel especial que podría jugar Salcedo para descubrir todo lo que está relacionado con casos de corrupción que son investigados por Fiscalía, la ministra de Gobierno, María Paula Romo, aseguró que mantendrán en Quito el apoyo y resguardo policial que tuvieron en Guayaquil.

La funcionaria recordó que la seguridad e integridad del detenido es desde este momento responsabilidad del sistema penitenciario.

Luigi García, abogado de Salcedo, habría impugnado el traslado de su cliente ordenado por el juez de Guayaquil Reinaldo Cevallos. Según él, el juez no les corrió traslado con el informe médico que definía que era posible el viaje a Quito y en su lugar dispuso el cambio. Confirmó que su cliente en primera instancia estará en una habitación de observación y posteriormente se lo derivará hacia un pabellón.

“Nos sorprendió que se ordene el traslado, pues debió esperar la total recuperación, porque hay una sentencia dictada por la Corte Provincial del Guayas donde se dispuso que solo puede salir una vez que se encuentre recuperado en su salud (…). Lo que estamos solicitando es una nueva pericia médica, con otro perito, dentro del Centro de El Inca, y el traslado a la Cárcel 4, donde tendrá mayores garantías de integridad física y su vida”, apuntó.

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El juez Reynaldo Cevallos decidió el cambio a Quito aduciendo que habría riesgos sobre la vida de Salcedo si él permanecía detenido en algún centro del sistema penitenciario de Guayaquil. Pese a que inicialmente se dijo que Salcedo iría a la Cárcel 4, en la capital, aparentemente una falta de espacio en ese centro impidió que se concretara el traslado hasta ese lugar.

García espera visitar y hablar mañana con su cliente en el CPPL de Quito y con el director del centro penitenciario para verificar el estado de salud de Salcedo, las condiciones en las que se encuentra en un lugar que aseguró “hay hacinamiento y donde hay casos de COVID-19” que ponen en riesgo la vida del detenido.

Desde las 08:30 de hoy, a Salcedo, en audiencia en Guayaquil, se le formularán cargos por el delito de asociación ilícita. Junto con él serán investigados Abdalá Bucaram Pulley, su esposa Gabriela Pazmiño, los hermanos Michel y Jacobo Bucaram Pulley, Noé Salcedo, Xavier J., Federico Z. y seis personas más.

Esta investigación se sumará a los procesos penales que mantiene abiertos por delitos como peculado, lavado de activos y fraude procesal. García asegura que no existen pruebas contundentes de los tipos penales que “erróneamente” ha formulado cargos la Fiscalía. (I)