En su tercera ampliación de versión dentro de la instrucción fiscal por el delito de delincuencia organizada, el exlegislador por Manabí, Daniel Mendoza, asegura que la Secretaría de Contratación de Obras (Secob) fue entregada a su excompañero de la Asamblea, el exasambleísta Eliseo Azuero, en representación de la Bancada de Integración Nacional (BADI), y que él le pidió ayuda «para poder efectivizar lo que el contratista le estaba entregando por concepto de pago de coima para él y los integrantes de su bancada legislativa».

En una versión de casi dos horas dada la mañana de este lunes, Mendoza insistió en que Azuero puso en el Secob a René Tamayo y Jorge Jalil, también procesados en la causa por delincuencia organizada. Además recordó que Franklin Calderón, otro de los investigados en esta causa, a través de su entonces asesor, Jean Carlos Benavides, le habló de dineros de coima dentro de la obra del hospital de Bahía de Caráquez.

«Debo mencionar que la propuesta de Franklin Calderón, que incluía un monto de dinero que no recuerdo con exactitud si era $ 300 000 o $ 350 000. Que Franklin Calderón propuso se lo ofreciera una parte para Elíseo Azuero y otra parte para el movimiento político Mejor, … Procedí a conversar con el entonces asambleísta (Eliseo Azuero) sobre la propuesta realizada por Franklin Calderón y él aceptó la misma y se comprometió a hablar con el ingeniero René Tamayo», señaló Mendoza

Según el exlegislador que se encuentra recluido en la Cárcel 4, de Quito, este primer acuerdo para el hospital de Bahía de Caráquez habría sentado las bases de la relación con Tamayo, Jalil, Calderón y Azuero que les permitiría a futuro ser parte del proceso de construcción del hospital de Pedernales. Mendoza aclaró que la comunicación con Elíseo Azuero fue la mayoría de veces de manera personal en la Asamblea, por vía telefónica a través de la aplicación Signal o en varias ocasiones mediante un mensaje.

Por otra parte, Mendoza mencionó la permanente insistencia que Elíseo Azuero ejercía sobre él para que le ayude a efectivizar cheques de BanEcuador que servirían para pagar parte de la coima que supuestamente recibiría del tema Pedernales Azuero en representación del BADI. Especialmente se daba la presión de azuero porque en esas fechas se estaba tratando un proyecto de Ley Económica urgente que estaba a cargo de Mendoza en la Asamblea.

«Intentaba (Eliseo Azuero) presionarme para que lo ayude con esa efectivización de dicho cheque o él y sus compañeros de bancada no votarían a favor del proyecto de ley», explicó Mendoza al fiscal Xavier Rosero.

Mendoza no permitió que se le realicen preguntas por parte de los abogados de los demás procesados, pues se acogió a su derecho constitucional al silencio. En su versión confirmó que son reales las conversaciones que mantiene la Fiscalía transcritas dentro del expediente de la causa. (I)