En Quito existen aproximadamente 5300 contenedores con una capacidad de 2400 litros y 3200 litros. El 35% de residuos sólidos de la ciudad se gestiona a través del servicio de recolección contenerizada, que está dividida en 49 rutas (33 al norte y 16 al sur), según datos de la Emaseo EP.

Cabe señalar, que durante el estado de excepción, alrededor de 300 contenedores sufrieron daños por diferentes causas, ya sea por choques, incendios, desmantelamiento y vandalismo; además, el deterioro en los mecanismos de apertura y cierre por la mala manipulación.

Según el informe de los funcionarios de la Emaseo EP, el monto de reparación de cada contenedor oscila entre 490 y 1980 dólares (más IVA); si es restitución total, el costo es de 2450 o 3760 dólares (más IVA). Asimismo, se debe considerar que, por el alto índice de siniestralidad, el deducible en 2020 de la póliza de seguro de cada contenedor es de 350 dólares.

En 12 meses, 160 contenedores fueron quemados en diferentes puntos de la ciudad, en su mayoría (100) en las protestas de octubre pasado.

En la emergencia sanitaria 35 contenedores fueron afectados por choque, en algunos casos se logró identificar a los vehículos causantes del perjuicio, pero los conductores abandonan el lugar del accidente, y no se hacen responsables del daño ocasionado. Desde el 2018 hasta la fecha, 210 casos de daños a la propiedad pública en la Fiscalía han sido investigados.

Por último, los funcionarios de Emaseo EP manifestaron que en la última semana se han cambiado contenedores dañados en diferentes puntos del Distrito Metropolitano de Quito, uno de ellos en el sector de Solanda ubicada al sur de la ciudad, donde se reemplazaron 14 contenedores para el beneficio de sus moradores. (I)