En el hospital público Vicente Corral Moscoso de Cuenca apenas el 5 % de los médicos que atienden en primera línea fue vacunado con el primer lote de vacunas contra el COVID-19 que arribó el pasado jueves.

Eso generó reclamos por parte de los profesionales que se sienten vulnerados. Hoy el gerente del sanatorio, Iván Feicán, justificó al decir que el listado fue “enviado desde planta central (Quito)”.

En esta semana la falta de aplicación del fármaco a todos los médicos de primera línea generó un plantón y la entrega de un comunicado exigiendo transparencia. La queja fue seguida de oficio por la Defensoría del Pueblo para aclarar la situación.

La delegada provincial de esa entidad, Verónica Aguirre, aseguró que el pasado lunes llamó al gerente del hospital, Iván Feicán, quien le confirmó que los beneficiarios de primera línea eran el 5 % del total que trabaja en esa área, que está a cargo de alrededor de 80 profesionales. También le ratificó que entre los primeros vacunados estaba él.

Cuestionó que el gerente haya sido vacunado porque al saber que no estaba directamente vinculado al área de atención COVID y maneja temas administrativos debía tomar otra actitud. “Lo menos que puedo hacer, para dar ejemplo, es proporcionar mi cupo a alguien que verdaderamente lo necesite y esté más vulnerable”, dijo.

Acerca de esta declaración, Feicán evadió una respuesta directa y justificó que “al estar el virus en el interior de una casa, en la comunidad, ¿quién no está expuesto?”.

Tras reconocer el bajo porcentaje de médicos de primera línea vacunados con las primeras 106 dosis, explicó que médicos de otras especialidades como clínicos y pediatras “rotaron en algún momento por UCI-COVID”. Asimismo mencionó que del listado hubo seis personas que no quisieron vacunarse y fueron sustituidas.

Aunque aún no hay fecha estimada para la llegada de un segundo lote, Feicán adelantó que ahora serán ellos los que elaboren la lista que será validada por los departamentos de UCI COVID y Enfermería COVID, sin olvidar a los de consulta externa y emergencia.

Otras molestias

El reclamo no vino únicamente de los trabajadores del hospital Vicente Corral Moscoso. Marcos Aguirre, médico del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), señaló que si bien ahí se vacunó a 160 profesionales que atienden en primera línea, ese número es insuficiente, al considerar que requieren como mínimo 900 dosis solo para los que están enfrentando el COVID y 1.400 para las que han laborado en áreas cercanas y 2.200 en el resto de áreas.

Según el boletín oficial del Ministerio de Salud Pública, en Azuay se reportan 15.658 casos positivos hasta este 28 de enero; 12.509 están en Cuenca. Fallecidos intrahospitalarios hay 492 y en el hospital Moscoso existen 20 camas COVID “que siempre están rebasadas”, según Feicán. (I)