El magnesio es un nutriente vital para nuestro cuerpo
Magnesio es un nutriente vital para nuestro cuerpo. El magnesio (Mg) es el 12º elemento de la tabla periódica y, como el fósforo, potasio y el hierro, es también un nutriente necesario para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo. Cuando no alcanzamos a acumular suficiente magnesio en nuestro cuerpo es posible que tengamos que recurrir a suplementos de magnesio. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Magnesio es un nutriente vital para nuestro cuerpo
Pero eso también implica un hipotético riesgo: ¿qué ocurre si nos pasamos con la dosis de magnesio, puede suponer esto un riesgo para la salud?
Antes de estudiar los riesgos del exceso de magnesio, conviene saber cuáles son sus beneficios y por qué es tan importante en nuestras funciones biológicas. Según explica la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, el magnesio es útil para que más de 300 enzimas generen sus reacciones químicas y funciona como conductor eléctrico dentro de nuestro cuerpo.
Esto implica que este elemento es vital para el correcto funcionamiento del corazón, de los huesos, músculos y nervios. Los problemas derivados de la deficiencia de magnesio pueden ser diversos, como una mayor facilidad de padecer fracturas óseas, migrañas, depresión, enfermedades cardiovasculares o diabetes.
En condiciones normales obtenemos el magnesio que nuestro cuerpo necesita de los alimentos que consumimos. Entre los alimentos ricos en magnesio podemos encontrar algunos frutos secos como las almendras o los cacahuetes; también legumbres como las alubias y la soja, arroz integral; carnes de res y pollo, o pescados como el salmón; plátano; chocolate oscuro; o lácteos como la leche y los yogures.
Con estos alimentos podemos alcanzar la cantidad diaria recomendada, que, de nuevo según la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, es de entre 400 y 420 mg al día para hombres adultos y entre 310 y 320 mg al día para mujeres adultas, con la excepción de embarazadas y lactantes, en cuyo caso la dosis diaria recomendada estaría entre los 350 y los 360 mg.
Los expertos señalan que existe un nivel tope de consumo tolerable para el magnesio. Este estaría en los 350 miligramos, pero solo considera el aporte que nos dan los suplementos y otras medicaciones como antiácidos y laxantes. El motivo es que nuestros riñones suelen ser perfectamente capaces de eliminar el exceso de magnesio procedente de los alimentos.
Normalmente el alto contenido en magnesio de los laxantes no supone un problema precisamente por su efecto laxante: este pasa de largo antes de ser absorbido por nuestro cuerpo. Sin embargo los medicamentos con magnesio son un factor de riesgo en las intoxicaciones por magnesio.
Entre los factores de riesgo también se encuentran los problemas de riñón. Al estar estos órganos involucrados en la depuración del exceso de magnesio, sus problemas pueden derivar en la acumulación de este elemento en nuestro organismo.
Demasiado magnesio
El exceso de magnesio en nuestro cuerpo es denominado hipermagnesemia, que a su vez se define clínicamente como una concentración sérica del elemento superior a los 2,6 mg/dL. El riesgo de padecer una intoxicaicón por magnesio es por todo ello muy bajo, pero no inexistente.
Los síntomas de esta deficiencia pueden ser variados. Entre ellos se encuentran las náuseas, vómitos, diarrea, depresión y pérdida del ánimo, pérdida de la fuerza muscular y baja presión sanguínea. Sin embargo el exceso de magnesio se puede traducir también en problemas cardiacos e incluso en un infarto.
El riesgo de una sobredosis es prácticamente inexistente en personas sanas. El mayor riesgo lo padecen las personas con problemas de riñón. Si nuestros riñones fallan a la hora de depurar el magnesio sobrante de nuestro cuerpo es posible que el consumo de suplementos y medicaciones que contienen altas cantidades de magnesio pueda llegar a suponer un resigo.
Los suplementos de vitaminas y minerales han ganado popularidad durante los últimos años. A veces necesarios a veces redundantes, la posibilidad de que hagamos un consumo excesivo de algunos no debe ser desdeñada. Es por eso importante informarse y consultar con especialistas en el campo de la salud.