DJI Neo

DJI Neo análisis review con características precio y especificaciones

Con el ámbito profesional y de puro ocio ya cubierto, el DJI Neo es el nuevo dron del gigante del vuelo que llega al mercado para ser una herramienta multiusos y muy polivalente para creadores de contenido, especialmente de redes sociales de consumo rápido. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

El DJI Neo es el dron más pequeño y ligero del fabricante. Cabe literalmente en el bolsillo, y su facilidad de uso hace que solo con posarlo sobre nuestra palma de la mano y pulsando un botón, grabe con calidad 4K un estupendo vídeo que subirá de nivel nuestro reel o vídeo/foto para redes. No nos lo inventamos, lo hemos probado a fondo antes de su lanzamiento para poder contaros lo más destacado de un dron que cuesta menos de 200 euros.

 

Ficha técnica del DJI Neo

 

dji

 

Pequeño como la palma de una mano. Literal.

Parece mentira que un dron capaz de hacer lo que ha demostrado el DJI Neo en nuestra prueba quepa en la palma de nuestra mano. Hablamos de unas dimensiones reducidas a la mínima expresión para un dispositivo con las capacidades del DJI Neo.

Lo de que cabe en una mano ya veis que es literal

Este tamaño tan compacto permite llevarlo de un lado a otro sin complicaciones, incluso en un bolso de mano, consiguiendo así uno de los objetivos de este nuevo producto: producir contenido multimedia de manera rápida, sencilla y en cualquier lugar. Si es que podemos volar en esa localización, no lo olvidemos.

Para el mercado de consumo, el poco peso y tamaño del DJI Neo es ideal: menos restricciones de uso, fácil de llevar de un lado a otro y muy seguro en caso de accidente

Pero incluso más importante que las dimensiones del DJI Neo es su peso. Es el más ligero de DJI con solo 135 gramos, quedando muy por debajo de los 250 gramos que marca la línea roja del mundo dron respecto a normativa y restricciones de uso.

Con esas dimensiones y peso así como su construcción en plástico, el DJI Neo es un dron con apariencia de menos resistente pero no por ello endeble ni frágil. En nuestra prueba se ha mostrado bastante resistente a las caídas incluso de un par de metros por algún choque que hemos tenido contra diferentes obstáculos. Y es muy seguro en caso de accidente o choque contra personas u objetos justo por ese poco peso.

Aquí entra en juego la ausencia de sensores de detección de obstáculos, lo que nos marca la gama de entrada en la que juega este nuevo DJI Neo. Este dron solo incluye los sensores de medición de altura pero no cuenta con frontales ni laterales. Para esta gama de entrada no es algo crítico pero hay que tenerlo en cuenta.

Aunque es muy fácil de pilotar y cuenta con ayuda, que no tenga sensores para detectar obstáculos limita su funcionamiento

El vuelo en interior es posible y seguro gracias a que las hélices van protegidas para evitar rotura fácil en caso de choque. Y tenemos unidades de repuesto en caso necesario.

Las hélices van protegidas pero podemos cambiarlas fácilmente en caso necesario. Y tenemos controles físicos y un puerto USB-C para la carga de la batería, que es extraible

Por último hay que indicar que la cámara y su sistema gimbal (de un solo eje, el vertical) cuentan con un accesorio de plástico destinado a proteger el mecanismo cuando transportamos el DJI Neo.

Pero su colocación no es práctica ni eficaz en términos globales porque a veces, con solo meter el DJI Neo en un bolso con otros elementos hacía que saltara dicha protección. Dada la importancia de la cámara en este dron nos hubiera gustado un sistema de protección integrado, por ejemplo de tipo retráctil aunque hubiera sido de accionamiento manual.

Mira mamá, sin mandos

Uno de los puntos destacados del nuevo dron DJI Neo es que no dependemos de un mando RC para su control eficiente. De hecho, el pack básico que tiene el precio de 199 euros es el que solo incluye el dron DJI Neo y una batería. Si queremos contar con un mando RC-N3 hay que optar por el pack que sale por 349 euros y que incluye el dron y la batería del pack básico, además de dos baterías extra y un cargador rápido para las tres baterías. Es sin duda el pack que recomendamos si no tienes mando RC compatible ni gafas DJI Goggles.

El DJI Neo cuesta 199 euros, pero no incluye mando RC. La buena noticia es que, si no quieres más alcance que 50 metros, te bastará con el smartphone para controlar el dron

El control que admite el DJI Neo sin mando RC lógicamente es más limitado pero puede que suficiente para presupuestos ajustados y a aquellos usuarios que no requieran de un alcance ni altura de vuelo muy altas.

El DJI Neo permite ser controlado directamente con el smartphone e incluso sin el, recurriendo a los modos de vuelo y grabación básicos y preprogramados pensados para la toma rápida de determinados tipos de vídeos, como veremos más adelante. Basta seleccionar el modo de vuelo/grabación, pulsar el botón y el dron despegará y regresará a nuestra mano de manera precisa y segura.

Para volarlo solo con el teléfono móvil necesitamos descargar la aplicación DJI Fly y conectar la aeronave vía Wi-Fi. El proceso es guiado mediante la aplicación y sumamente sencillo y rápido.

Los controles de vuelo Wi-Fi solo con el smartphone no están muy conseguidos ni son cómodos de usar

La interfaz de control de DJI Fly es muy clara y concisa. Permite el despegue con un solo toque así como el control básico del dron mediante joysticks virtuales en la pantalla de nuestro teléfono.

El control vía Wi-Fi del DJI Neo usando solamente los joysticks virtuales en la pantalla queda a años luz de la experiencia con un mando RC pero nos salva de un apuro con rapidez

En este modo de funcionamiento hay limitaciones de distancia y altura de vuelo, marcadas como máximo a 50 metros pero la experiencia de vuelo que conseguimos queda muy lejos de la que alcanzamos con el mando RC. No nos ha acabado de convencer salvo para momentos puntuales donde realmente no queramos controlar de manera precisa el dron y solo necesitemos una grabación sencilla y rápida del entorno.

Para sacarle todo el partido a sus posibilidades de vuelo y creación de contenido lo mejor es recurrir al mando DJI RC-N3, el cual no incluye pantalla sino que depende de la de nuestro smartphone para la visualización de opciones de vuelo y la propia cámara del dron.

Pero aquí ya tenemos palancas de control clásicas (muy buena idea poder retirarlas y almacenarlas en le propio mando para su transporte cómodo y seguro) y sobre todo un alcance de dron más serio: hasta 10 kilómetros. Pero es solo en teoría y en condiciones ideales que nunca se darán en la vida real. Para escenarios como ciudad o espacios naturales al aire libre hay que contar con distancia de transmisión de vídeo de entre 1 y 3 km.

Un detalle que se agradece en un equipo que queremos llevar siempre con nosotros: controles que se pueden desenroscar y guardarlos de manera segura

El mando de control DJI RC-N3 pesa alrededor de 300 gramos y viene preparado para disponer en él de manera cómoda y segura un smartphone, el cual se puede cargar al mismo tiempo con la batería interna del mando. Su autonomía es de unas tres horas sin cargar el smartphone y de poco más de una hora si usamos su capacidad de recargar la batería del teléfono.

Nuestro smartphone de prueba, un iPhone 14 Pro, encajaba al límite en el mando RC, así que ojo con la anchura del modelo que queramos usar. Y con funda es complicado que el conector funcione

Un último modo de vuelo para el DJI Neo tiene a las gafas DJI Goggles 3 como protagonistas, permitiendo un uso FPV. Aquí la experiencia creemos que escapa al propósito de este dron de iniciación pero está bien que se mantenga esa posibilidad para el más básico de los drones de DJI.

 

App DJI Fly

En el manejo del DJI Neo cobra especial importancia la aplicación DJI Fly. Lo hace tanto porque las opciones de cámara o del propio dron las podemos gestionar allí como por la posibilidad de usar el smartphone para volar el dron sin mando RC de por medio.

La interfaz es sencilla y muy completa en opciones e información. Contamos por ejemplo con acceso directo a zonas recomendadas de vuelo así como restricciones de las mismas o requisitos necesarios para iniciar el vuelo.

Además de darnos indicaciones de lugares aptos para el vuelo, el registro de los vuelos nos permite repasar los vuelos realizados con cierta «telemetría» básica

Hay también acceso a los manuales y guías de usuario en línea de DJI, a la galería de vídeo y fotos así como a funciones de edición de vídeo con ayuda de plantillas.

Si no queremos dejar en manos de la aplicación todo el proceso creativo, el editor integrado nos ha parecido de los más completos que podemos encontrar en un dispositivo móvil. Intuitivo, muy robusto y con todas las opciones necesarias como control de velocidad, transiciones, efectos, rotulación e incluso gestión de bandas sonoras.

Sin apenas esfuerzo podemos realizar montajes muy completos y precisos desde la aplicación

Grabación de vídeo 4K de manera sencilla

Si bien el DJI Neo es un dron divertido y fácil de pilotar, como contaremos más adelante, el sentido del mismo tiene más que ver con sus posibilidades como elemento de creación de contenido en vídeo y foto.

El DJI Neo incluye una sola cámara, la principal, con un sensor de 12 MP y tamaño de 1/2” (f2.8), más pequeño que el que podemos disfrutar en los drones de más nivel de la compañía. Pero dado su perfil puramente amateur e incluso social, consideramos este sensor como una muy buena opción con grandes resultados sin esfuerzo, que es de lo que se trata.

Pese a su tamaño, el DJI Neo admite la grabación 4K con muy buena calidad y estabilidad

La grabación de vídeo alcanza la resolución 4K a 30 fps (para los 60 fps hay que reducir a 1080p la resolución), con casi 120 grados de campo de visión, estabilización electrónica y bitrate máximo de 75Mbps. En cuanto a la toma de fotografías, la resolución máxima queda establecida en 12 MP y en formato jpeg solamente, nada de RAW.

Para el control manual del ángulo de inclinación vertical de la cámara tenemos botón específico en la aplicación DJI Fly para cuando gestionamos el vuelo directamente desde la aplicación, así como una rueda de giro física en la parte trasera superior del mando RC que, aunque funcional y sencilla de usar, nos hubiera gustado que se implementara de alguna otra manera.

Las funciones de cámara, tanto de movimiento tilt del gimbal como el cambio de foto a vídeo tienen sus botones dedicados en el mando RC

Además del modo automático de grabación de vídeo y foto, el DJI Neo admite controles manuales de diferentes parámetros directamente desde la pantalla. Tenemos control de valores como la ISO o la velocidad de obturación, un detalle importante en esta gama.

Este modo Pro de grabación es muy bienvenido pero el modo automático funciona tan bien que nos quedamos sin duda con la calidad global del vídeo que obtenemos y lo poco que nos cuesta conseguirlo. Aquí el DJI Neo es imbatible como podemos apreciar en las muestras de vídeo que compartimos con vosotros y que hemos podido grabar estos días previos al lanzamiento oficial del nuevo dron de DJI.

Sin llegar a obtener el rango dinámico de drones con sensores de más tamaño, la calidad general es buena. Se agradece la posibilidad de grabar en 4K para ser un modelo de entrada. Y con un poco de práctica a la hora de realizar los movimientos con el DJI Neo, los planos quedan perfectamente estabilizados, sin duda su mejor punto.

La estabilización y calidad del vídeo 4K del DJI Neo asombran para el precio del dispositivo, solo 199 euros

Lo que hay que tener en cuenta es cómo afecta el viento a la estabilidad de un dron de tan poco peso. Sirva como ejemplo la toma realizada en una cumbre no muy alta pero algo expuesta a rachas de viento que, si bien no impedían volar el DJI Neo, sí que nos dejaban algunos planos menos estables y fluidos como con ausencia total de viento.

Como otros drones de DJI, hay un modo de vuelo específico para grabar vídeo, el llamado cinematográfico, el cual ralentiza la velocidad de giro así como la de subida y bajada del dron, amén de gestionar los giros y movimientos en el aire para que sean muy sosegados y ayuden a unos planos que a veces parecen grabados a cámara lenta.

Incluso nos ha parecido excesivamente lento este modo y recomendamos más algo de práctica con los controles y usar el modo clásico.

El espíritu social del DJI Neo a la hora de grabar vídeo se refuerza con los llamados modos QuickShots, que no son una novedad pero pegan perfectamente con el DJI Neo.

Estos modos nos ofrecen un modo directo, sencillo y rápido de obtener vídeos perfectos en entornos controlados. Hay varios de ellos que encajan como un guante con el DJI Neo, como el Cohete, Órbita o Dronie.

Nos ha gustado especialmente el modo de seguimiento, que funciona sin errores. Es capaz de seguir a una persona pero también a vehículos, lo que requiere más precaución durante su uso.

Los LEDs de cada modo junto con avisos sonoros nos informan sobre el vuelo programado que vamos a realizar sin necesidad ni tan siquiera de smartphone

Como los otros QuickShots, no necesitamos ni mando ni teléfono móvil para usar el modo de seguimiento. Basta coger el dron DJI Neo sobre la palma de la mano y dirigiéndolo hacia nosotros. Luego escogemos con el botón físico correspondiente el modo que queremos usar (tienen un icono identificativo cada unos de ellos que se ilumina cuando lo seleccionamos) y pulsamos un par de segundos.

El DJI Neo nos indica con un aviso sonoro que el modo se ha activado, nos reconoce y se pone en marcha. Tras acabar la grabación, que se almacena automáticamente en el dron sin necesidad de llevar el smartphone con nosotros, basta colocar la mano bajo el dron y éste aterrizará de manera suave sobre la palma. A destacar el buen uso que hace DJI de la IA para el reconocimiento de rostros y el mantenimiento en todo momento del sujeto en el centro de la acción, como apreciamos perfectamente en el vídeo siguiente.

En todos estos modos podemos recurrir a la aplicación DJI Fly para configurar algunos parámetros como altura de vuelo o distancia a la que queremos que nos grabe, ajustando de esta manera el vuelo al escenario.

En el uso de los Quickshots es imprescindible recordar que este DJI no lleva sensores capaces de detectar un obstáculo, por lo que debemos asegurarnos que el entorno es seguro y suficientemente amplio y libre de obstáculos al usar cualquiera de estos modos autónomos.

La breve muestra de arriba nos deja ver como en el modo boomerang, muy interesante porque el DJI Neo se mueve alrededor nuestro en diferentes posiciones y alturas para grabarnos en un determinado lugar, resulta fallida debido a que el DJI Neo no es capaz de detectar unos matorrales en altura que se interponen en su vuelta alrededor nuestro.

Algunos modos de grabación automáticos, muy resultones y sencillos de usar, hay que usarlos con precaución debido a que el DJI Neo no detecta obstáculos

Como hemos indicado anteriormente, el DJI Neo se ha mostrado bastante resistente a este tipo de accidentes ligeros, contando además con un modo de localización tanto por posicionamiento GPS como por sonido para recuperarlo en caso de que ocurra un accidente como el anterior.

Volando con el DJI Neo

Lo queramos para grabar vídeo para redes sociales o por puro ocio, no hay que olvidar que el DJI Neo nos va a permitir mucha diversión cuando lo volamos. Aquí DJI vuelve a mostrar músculo y presumir de una facilidad de vuelo y control del dron como pocos pueden igualarle.

Con el mando RC-N3 conseguimos el máximo control, diversión y posibilidades de vuelo del DJI Neo, aunque no es su punto fuerte debido a su poco peso

De manera general se mantienen los tres modos de vuelo enfocados a diferentes sensaciones para el usuario. Podemos escogerlos directamente con ayuda del mando RC-N3, y se incluyen los sospechosos habituales: modo cinematográfico del que ya hemos hablado, el modo clásico y también un modo deportivo donde se prima la velocidad del DJI Neo.

Escoger uno u otro marca bastante la diferencia de uso. Como ejemplo, la velocidad máxima de ascenso en el modo cine es de 0,5 m/s por los 3 m/s del modo deportivo. En cuanto a la velocidad de vuelo, en modo manual se obtiene la máxima, que es de 16 m/s.

El uso del mando DJI RC-N3, que requiere de un smartphone como pantalla del mismo, es requisito indispensable para disfrutar al máximo de la experiencia de vuelo con el DJI Neo. La ergonomía del mando y la calidad de las palancas de control ayudan a ello.

Con el mando conectado al dron, podemos configurar bastantes parámetros del vuelo, desde altura máxima a la que queremos volar el dron hasta la distancia máxima que deseamos que se pueda separar de nosotros.

La normativa nos indica que debemos de tener siempre a la vista el dron, algo que con el DJI Neo es problemático a partir de los 50 metros

Pero el vuelo libre y de ocio no es el punto fuerte de este dron de DJI por un motivo claro: su poco peso.

Según la ficha técnica del DJI Neo, el vuelo es posible con viento de hasta 8 m/s, lo que son casi 30 km/h. En nuestras pruebas, superando los 16 km/h según meteorología, ya nos indicaba un aviso de rachas de viento. Este aviso solo limita la capacidad del dron DJI Neo para regresar automáticamente al punto de despegue debido a que le cuesta calcular la autonomía restante para asegurar dicha maniobra, pero el dron sigue siendo manejable aunque con precaución.

Sin embargo, la estabilidad de vuelo se resiente y cuesta sentirse seguro cuando hay rachas de viento. Y lógicamente eso afecta a la grabación de vídeo.

Algo muy importante a la hora de volar un dron como el DJI Neo es el tema de la visibilidad. Aunque por sus características podemos alcanzar hasta los 120 metros de altura, su tamaño tan reducido hace bastante complicado mantener la visión directa sobre el DJI Neo a partir de 75 metros.

También hemos apreciado en nuestra prueba de campo que si dejamos unos minutos el DJI Neo encendido sin volar o tras un vuelo de varios minutos a pleno sol de mediodía, es fácil que salte la alerta de calentamiento excesivo del dron. El cargador simultáneo de tres baterías es una compra más que recomendable dada la autonomía real de 10 minutos

La autonomía de vuelo es el otro aspecto en el que el poco peso y tamaño del DJI Neo es crucial. Según DJI, la batería del nuevo dron, con capacidad de 1435 mAh, permite una autonomía máxima de 18 minutos. La cifra, como suele pasar, queda lejos de la realidad del vuelo en un entorno no controlado como en el que se realizan los test de los fabricantes para alcanzar estas cifras.

El DJI Neo no está pensado para vuelos ni grabaciones largas. De media conseguimos 10 minutos de autonomía, así que es recomendable comprar baterías extra y un cargador múltiple externo

En las diferentes pruebas de vuelo, con cámara y sin cámara activa, hemos promediado 10 minutos de autonomía efectiva. En todo momento tenemos indicación en la interfaz de vuelo de la batería restante (en porcentaje, no en tiempo de vuelo) así que conviene tenerlo en cuenta porque especialmente el tipo de vuelo, altura y viento varían bastante la autonomía final que podemos conseguir.

El DJI Neo, salvo que haya excesivas rachas de viento, se guarda suficiente autonomía para el regreso automático al punto de origen en caso de que así lo queramos.

Cuando la batería se agota, el DJI Neo vuelve automáticamente al punto de despegue … si no hay rachas de viento muy fuertes

Las baterías, que pesan solo 45 gramos cada una, pueden ser cargadas directamente colocadas en el DJI Neo, usando para ello un cable USB-C conectado al puerto trasero del dron, bien accesible.

También podemos optar por extraer la batería, algo que se hace de manera cómoda, rápida y segura, para recurrir al cargador triple, el cual solo admite la carga simultánea de las tres baterías si lo conectamos a un adaptador (no incluido) de al menos 45W. En ese caso, hemos promediado una hora de carga más o menos por cada batería.