
Denza Z9GT coche chino de BYD
Denza Z9GT coche chino de BYD . Lombardía es todo lo que uno puede esperar del norte de Italia. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Es la región más poblada del país. La más rica. Un lugar donde se mezcla el lujo, el diseño y la industria. Aúna en una sola región la puesta de sol idílica en el Lago Como, donde ya se respira ambiente suizo, la elegancia de Armani, lo grandioso de Il Duomo de Milán y la representación máxima de la última tecnología con los monoplazas de Fórmula 1 recorriendo a toda velocidad el circuito de Monza.
No fue en Monza pero sí en un circuito donde Denza nos hizo una primera demostración de lo que tienen preparado para Europa. Una de las compañías de lujo de BYD nos dejó sentarnos en su Denza Z9GT, una suerte de shooting brake deportivo, de tintes exquisitos y una carga tecnológica que sorprende.
Lamentablemente, sólo nos quedamos en el recinto del circuito de Vairano, entre Milán y Pavía. De momento, los coches no están homologados para circular por las carreteras europeas pero lo harán muy pronto. Pese a ello, fue una jornada de lo más interesante.
Lo que se viene
Como ya te contamos hace unos días, BYD traerá a Europa una de sus marcas de lujo. Podríamos decir que es su marca premium, un paso por encima de BYD (la generalista) y de Yangwang (el lujo más extremo). Pero lo cierto es que, visto lo visto, Denza se encaminaría más a lo que puede ofrecer un Porsche que un Audi, si hablamos en términos del Grupo Volkswagen.
Lo realmente complicado para Denza, que nació como fruto de una colaboración con Mercedes, es demostrar que puede sentarse en la mesa de una Porsche que es una referencia en el coche europeo. Su experiencia, su historia y su producto lo han elevado a una posición muy especial, conquistando a los aficionados más adinerados que bien podrían comprarse un Ferrari pero también a bolsillos más modestos (dentro de lo que cabe) que aspiran a llevarse a la boca algo de Porsche con las versiones más modestas de un Macan o un Cayenne.
Todo indica que Denza no aspira, ni de lejos, a hacer un gran volumen de ventas. Parece evidente que se trata de demostrar a los escépticos dónde se encuentra China (y más concretamente BYD) en el mercado del automóvil.
Tecnologías que sorprenden
Estamos acostumbrados a que los fabricantes europeos de lujo, aquellos que optan por ofrecer un gran rendimiento, se centren en las capacidades mecánicas de sus propulsores. Los BMW y Mercedes más potentes, los Porsche de referencia, todos dirigen su discurso a las últimas innovaciones que han conseguido con sus propulsores de combustión.
Parece tener sentido viendo que los coches eléctricos parecen haberse quedado lejos de ese mercado del lujo en Europa o, al menos, no tienen un poder de atracción tan grande. En China, sin embargo, se apuesta más por los juegos más llamativos. Para muestra este artículo de Bloomberg en el que se recogía la opinión de una adinerada conductora que había quedado muy decepcionada porque su Porsche Taycan «sólo era un Porsche eléctrico». De ahí que saltara al mercado local.
El público en China pide otro tipo de soluciones. Para ejemplo, el sistema de aparcamiento de BYD. Una chuchería que, sinceramente, creo que es inútil para el día a día pero que demuestra lo avanzado técnicamente que está la compañía.
Y es que este Denza Z9GT es capaz de girar sobre su eje delantero haciendo rotar el trasero (a costa de quemar neumático) y aparcar en línea con, se supone, mayor facilidad. Este mismo sistema llamado e³ Parking lo utiliza para moverse completamente en diagonal, una sensación especialmente rara cuando vas dentro del coche.
Lo interesante es la aplicación práctica real que tiene la tecnología que aquí se aplica. El coche tiene un eje trasero direccionable. Es decir, las ruedas traseras se pueden girar en el mismo sentido que las delanteras (para redondear la curva) o en sentido contrario, para reducir el radio de giro y maniobrar con mayor facilidad.
Pero, además, éstas no tienen por qué girar a derecha o izquierda paralelas. Es posible que las ruedan utilicen una posición convergente o divergente. Es decir, se abran o se cierren sobre sí mismas y, por tanto, las posibilidades a la hora de estacionar se multiplican, permitiendo esta opción de rotar el coche sobre el eje delantero o desplazarse en diagonal.
Sin duda lo más interesante es comprobar cómo un coche de casi 5,20 metros se mueve en espacios estrechísimos. En lugares donde un compacto de cuatro metros y medio necesitaría varias maniobras para salir del atolladero. Si llegara a salir del mismo.
Esta tecnología se combina con un control de la carrocería exquisito. En nuestras pasadas por el circuito sometimos a la berlina china a diferentes terrenos, con asfaltos rotos o con ondulaciones. Especialmente en este último terreno, el coche contenía la carrocería a la perfección. Pasando a buena velocidad, no sentimos en ningún momento que la situación se desmadrara y que las inercias y los pesos se convirtieran en los protagonistas.
Ese control de la carrocería llegó al extremo durante una de las pruebas estrella de la jornada. Un conductor a bordo de un Denza Z9GT fue al final de la pista, aceleró con todas sus fuerzas y cuando había superado los 180 km/h, un ruido sordo nos confirmó lo que la había ya nos había adelantado con una pequeña humareda rosa: el neumático había reventado.
¿Qué pasó? Nada. Eso es lo más escalofriante. Si un coche revienta el neumático a 180 km/h podemos esperar que la carrocería se mueva y el conductor pierda el control del coche a poco que toque el volante para compensar el pinchazo. Nada de esto sucedió porque el sistema neumático de suspensiones compensa inmediatamente la pérdida de soporte que ejerce la rueda.
Con todo lujo de detalles
Como decimos, poco podemos decir del coche en marcha. De hecho, ni si quiera tenemos las especificaciones técnicas de los coches que llegarán porque, a falta de homologación, nos subimos a coches con las especificaciones chinas.
El Denza Z9GT se vende en formato eléctrico pero nosotros lo probamos en su versión híbrida enchufable. Es un coche que con esta mecánica cuenta con un motor de combustión de cuatro cilindros 2.0 turbo de 207 CV. En el eje delantero le acompaña un motor de 272 CV eléctrico y encontramos otros dos motores eléctricos en el eje trasero, esta vez de 299 CV.
La batería es de 38,5 kWh y homologan una autonomía según el optimista ciclo chino CLTC de 201 kilómetros. Traducido a WLTP, se deberían superar los 150 kilómetros pero no son datos oficiales.
Si hablamos del eléctrico, se repite jugada pero sin el motor de combustión. En este caso tenemos un motor delantero de 313 CV y dos detrás de 326 CV cada uno. Suman un total de 965 CV pero, como sucede con el caso anterior, no se ha hecho oficial la potencia que pueden generar porque no sabemos si la batería LFP de 100 kWh es capaz de suministrar la electricidad suficiente para esos más de 900 CV cuando todo funciona a pleno rendimiento.
La autonomía en este caso es de 630 km según el ciclo chino CLTC por lo que son esperables más de 500 kilómetros según ciclo WLTP. En esta versión, alcanza los 1100 km/h desde parado en 3,4 segundos y una velocidad punta de 240 km/h. El híbrido enchufable es ligeramente más lento, con 3,6 segundos en el 0 a 100 km/h y una máxima de 230 km/h. En ambos casos, la batería funciona con una tensión nominal de 800 voltios.
En la prueba, aprovechando la larguísima recta del circuito, nos acercamos a velocidades de casi 200 km/h y comprobamos lo bien aislado y asentado que va el coche. Pese a todo, como decimos, fue una toma de contacto muy rápida de la que apenas podemos sacar conclusiones.
Lo que sí notamos es que todo se siente de una calidad sobresaliente. La dirección tiene mucho mejor peso que cualquier marca de coches china que haya probado. Es cierto que está tan filtrada que no transmite qué hacen las ruedas pero ni la dirección ni el freno se sienten chiclosos y artificiales como una buena parte de coches de coches electrificados del mercado. Y aquí abro la mano más allá de las compañías chinas que aunque suelen tener puestas a punto demasiado comodonas, en materia de dirección y frenos blandos no están solas.
En cuanto a las sensaciones que transmiten los materiales y los acabados del coche, todo está a una gran altura. El puesto de mando es muy cómodo, el volante y todo lo que queda al alcance de la mano está bien rematado y los pocos controles físicos que hay en el puesto de mando se sienten de una calidad muy alta, con un ajuste muy bueno.
Si hablamos de software, se siente un salto de calidad frente a BYD. Es lógico teniendo en cuenta que su enfoque apunta a un segmento propio del lujo más que del premium. La calidad de las pantallas que hacen las funciones de espejo retrovisor es muy alta (pese a ello, nada como un cristal).
Lo poco que manejamos la pantalla principal y navegamos entre los menús nos dio una impresión muy buena, moviéndose con una soltura propia de los mejores móviles del mercado. Todo parecía volar. El cuadro de instrumentos aprovecha una interfaz que ya hemos visto en los últimos BYD pero mejorada con una pantalla a la altura.
Además, cuenta con detalles propios de un coche de muchas decenas de miles de euros (no se ha confirmado pero puede romper la barrera de los 100.000 euros cuando llegue a Europa). Los asientos traseros son calefactables, ventilados y tienen masaje, así como una banqueta deslizable para las piernas y un respaldo reclinable.
La plaza central guarda un espacio que hace las funciones de nevera o de termo, lo que el pasajero decida pero puede llegar a congelar el agua porque se puede establecer una temperatura de -6ºC y a calentarla mucho (hasta 50ºC). También hay un hueco disponible en este sentido para las plazas delanteras. En este caso, la plaza no sería abatible si monta la nevera.
Y hay que sumar la apertura eléctrica de las puertas o un sistema de sonido firmado por Devialet que ofrece un sonido excelente. la carga inalámbrica del teléfono móvil alcanza los 50W y cuenta con unas pequeñas almohadillas de goma que impiden que el móvil se desplace y pierda la carga por inducción. Los USB de las plazas traseras cargan aparatos electrónicos a 60W.
En resumen, a final de año conoceremos más en profundidad todo lo que Denza tiene para Europa. Entonces sabremos las especificaciones técnicas claras y confirmadas de sus mecánicas, su autonomía esperada y, por supuesto, su precio.
Lo que es seguro es que llegará con todas estas chucherías al mercado porque, tal y como nos confirmó la marca, todo lo que vimos llega de serie, sólo es posible elegir el color de la carrocería o del interior. ¿Precio? Se admiten apuestas. Lo que es seguro es que por calidad de los materiales, Denza pone el listón muy alto.