Cómo limpiar correctamente una prótesis dental
Limpiar prótesis dental. Cómo limpiar correctamente una prótesis dental. En una prótesis dental, al igual que en los dientes reales, pueden asentarse bacterias y formarse placa y sarro. Por eso, es aconsejable limpiarla en profundidad regularmente, de acuerdo con la iniciativa ProDente. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
La prótesis debería limpiarse al menos dos veces por día con un cepillo especial, preferentemente después de las comidas. Los expertos recomiendan usar para ello espuma limpiadora o jabón líquido, que luego hay que enjuagar bien.
Es importante prestar especial atención durante la limpieza a las superficies internas y externas de la prótesis que tienen contacto con el paladar y la cresta alveolar.
Consejos
Consejo de los expertos: llenar el lavatorio antes con agua o colocar en él una toalla. Así, en el caso de que la prótesis se caiga de la mano durante la limpieza, no se daña.
Básicamente, debería enjuagarse la boca con agua después de cada comida y, en lo posible, quitar la prótesis y lavarla bajo agua corriente.
Adicionalmente, se puede hacer una limpieza con tabletas especiales, pero eso no debería sustituir el uso del cepillo. Lo que no se debe usar es pasta dentífrica, porque genera un fuerte desgaste y puede dañar la prótesis.
Si sobre la prótesis se formaron ya capas duras, jamás deberían quitarse con un cuchillo u otros elementos cortantes, advierte ProDente. Porque de esa manera puede resultar dañada. Lo más recomendable es acudir al odontólogo para que haga ese trabajo. Lo mismo vale para el caso de que empiece a presionar en algún punto o que el uso de la prótesis se vuelva molesto.
Y a no olvidar: también el interior de la boca, en especial la mucosa bucal cubierta por la prótesis y la cara superior de la lengua necesitan ser limpiadas con regularidad. Esas partes deberían lavarse diariamente con un cepillo de dientes suave y además masajearse. Así se estimula la irrigación sanguínea, lo que previene infecciones.