Colada morada reactiva ventas en restaurantes ecuatorianos en Madrid

La hilera de más de diez personas que el sábado por la tarde se agolpaban a las puertas del restaurante Casa Ecuador se convirtió en la instantánea recurrente en los últimos días en Madrid. 

Desde que en España estallara la crisis económica, la caída en las ventas (en algunos casos de hasta un 50 %) provocó el cierre de sitios de venta de comida nacional.

Los que se mantienen han afrontado la reducción del número de clientes bajando los precios o esperanzados en el aumento de la demanda, especialmente durante festividades en las que se preparan platos tan tradicionales como la fanesca en Semana Santa o la colada morada y las guaguas de pan en el Día de Difuntos.

El peregrinaje de un creciente número de comensales a Casa Ecuador empezó hace un par de semanas cuando en uno de los ventanales se anunciaba la venta de la tradicional bebida. El momento más álgido se vivió el fin de semana.

Familias enteras coparon las mesas del local. “No estamos para tirar la plata pero queríamos darnos un gustito y es una manera de que nuestros hijos y nietos que han nacido aquí conozcan nuestras tradiciones”, comentaba José Ernesto Chávez rodeado de sus parientes.

Cuando Paco Salgado llegó el domingo, 2 de noviembre, a última hora de la tarde al restaurante Rincón Ecuatoriano no encontró sitio ni colada morada. “Como nunca, hemos estado llenísimos todos los días pero para los que se quedaron con las ganas vamos a seguir vendiendo colada morada hasta el miércoles”, apunta un mesero del establecimiento.

Jorge Vela, vendedor ambulante de platos ecuatorianos, reconoce que la fecha ha ayudado a “mejorar los ingresos”. De lunes a viernes, ofrece morocho y quimbolitos a la salida del metro de Cuatro Caminos, uno de los barrios con mayor población latina. “Preparé colada morada y se acabó todo en menos de una hora. No quedó ni para mí”, señala entre risas.