Aplazan audiencia en EE UU a exjuez venezolano acusado de narcotráfico

Una audiencia de culpabilidad prevista para este jueves en Florida contra el exjuez venezolano Benny Palmeri-Bacchi, arrestado en julio en Miami y acusado de conspiración para distribuir cocaína en Estados Unidos fue pospuesta para el próximo martes.

La Fiscalía federal del Distrito Sur de Florida, que finiquita junto con Palmeri-Bacchi, de 46 años, un acuerdo de culpabilidad, informó que la audiencia se realizará el martes 28 de octubre.

En un caso que involucra también a ex altos cargos del Gobierno venezolano, Palmeri-Bacchi enfrenta además acusaciones de «obstrucción a la justicia» y «lavado de dinero», cargos de los que se había declarado inocente tras su detención el 18 de julio pasado en el aeropuerto internacional de Miami (MIA).

El exmagistrado y también abogado fue detenido en el MIA, desde donde iba a visitar con su familia, el parque temático de Orlando.

El 30 de septiembre, la defensa de Palmeri-Bacchi presentó ante la jueza Úrsula Ungaro una moción para una nueva audiencia de declaración de culpabilidad.

La detención del exjuez obedeció a una investigación de la que también era objeto el exjefe de inteligencia militar Hugo Carvajal Barrios, detenido en julio en Aruba y que fue liberado por las autoridades de la isla caribeña dependiente de Holanda.

Según documentos judiciales, el general retirado Carvajal era solicitado por Estados Unidos en extradición acusado en este país de hacer negocios con el capo narcotraficante colombiano Wilber Varela, apodado el «Jabón» y fallecido en 2008.

También se investigaba al exdirector de Interpol Rodolfo McTurk. Los hechos se produjeron entre febrero de 2009 y septiembre de 2010, cuando los acusados (Palmeri-Bacchi y McTurk) «voluntariamente y juntos conspiraron» con el narcotraficante Jaime Alberto Marín Zamora para distribuir cocaína en EE.UU., según los documentos judiciales.

Ambos fueron acusados de «retrasar y evitar la extradición» de Marín Zamora de Venezuela a territorio estadounidense con el objetivo de «obstruir, influir e impedir» las acciones judiciales de la Fiscalía federal del Distrito Sur de Florida.