Afecta el frío al router funciona mejor o peor. Es el momento perfecto para conocer si condiciones meteorológicas o el clima pueden ser capaces de afectar a las conexiones WiFi de los routers. Ya sean tormentas, lluvia, frío o calor, puede que te interese conocer si realmente el WiFi va peor o mejor dependiendo de las condiciones climáticas de ese día. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.

Seguramente alguna vez te habrás preguntado si la conexión WiFi va peor ese día porque llueve y hace frío, o por el terrible calor que hace. Pues bien, vamos a ver en detalle si el clima afecta a las redes WiFi, ya sea para mejor o para peor.

El frío y el router

Aunque ya va quedando cada vez menos para que acabe el invierno, todavía nos quedan por delante bastantes semanas de frío. Y con ello, es posible que te hagas la pregunta: «¿el frío afecta al router?«. Pues bien, aquí entra en juego la temperatura del dispositivo.

Como todo aparato, está diseñado para trabajar de forma óptima en unas circunstancias en concreto, por lo que tiene un rango establecido de temperatura. Una vez que se sobrepase o no se llegue al mínimo, el rendimiento del dispositivo irá peor. Esto mismo sucede con dispositivos móviles, tablets, etc.

Sin embargo, es mucho más fácil conseguir elevar la temperatura que enfriar un router. Por esto mismo, el calor será el peor enemigo. Cuando la temperatura supera los 30-32 grados, el rendimiento del equipo será malo, por lo que la intensidad de las conexiones WiFi será peor. Y, no solo esto, sino que a lo largo podría afectar a los componentes internos del router. En cualquier caso, dependiendo de la temperatura, puede afectar a la velocidad WiFi.

¿Qué afecta más al WiFi?

Uno de los primeros aspectos que debemos tener claro es que, todo dependerá de dónde esté situado el router y cuál es la conexión WiFi que usamos. Por ejemplo, si el router está dentro de nuestra casa, por más llueva, nieve, haya tormenta… no nos afectará. Sin embargo, si nos conectamos a una conexión WiFi que, de por medio, está la calle con esas condiciones meteorológicas, entonces sí que notaremos un empeoramiento en la red.

Esto mismo sucede con la conexión móvil, ya que se ve afectada si la capa de lluvia, niebla, etc., es muy densa. No obstante, el factor que nos debe preocupar dentro de casa es la temperatura. Básicamente, porque es uno de los puntos que afecta mayormente a nuestros routers y, con ello, a la conexión WiFi.

Por tanto, solamente nos deberemos preocupar de las condiciones meteorológicas del exterior cuando usemos redes móviles o un WiFi fuera de nuestro edificio o casa. Por ejemplo, si estamos en el jardín o en el patio. Aunque, aquí también entra en juego de la instalación de fibra o ADSL. No es la primera vez que los usuarios ven como el cableado externo de los edificios tienen problemas. Por lo que es otro punto a tener en cuenta.

En ese caso, ten claro que lo que peor sienta a la velocidad WiFi es la lluvia. Sin duda alguna, esta condición climática, junto con las tormentas, influyen en gran medida en las conexiones. Es más que probable que hayas notado que, en los días lluviosos o con mal clima, la conexión a Internet empieza a funcionarte lentamente. Esto se debe principalmente a la instalación externa y no de tu casa. En cuanto al granizo, todo dependerá del tamaño y la intensidad, al igual que la nieve. Sin embargo, el viento no afectará al WiFi.