Prefecta de Pichincha no está de acuerdo con pedido del presidente de la República de abrir las actividades

Advirtió que una medida así es peligrosa, porque los contagios con la pandemia podrían multiplicarse, provocar crisis sanitaria y morir muchos ciudadanos.
Punto Noticias. El presidente Lenín Moreno exhortó a los 221 alcaldes que abran la economía, para retomar las actividades en medio de la pandemia del covid-19.
Con el argumento de cuidar el empleo y la productividad, insistió en su llamado a los alcaldes para que abran la economía con responsabilidad. “No podemos cerrar los ojos frente a la realidad”, señaló.
La prefecta de Pichincha, Paola Pabón, respondió al requerimiento del mandatario señalando que mientras el Gobierno Nacional está alejado, cada vez más distante de la realidad de lo que pasa en los territorios, los presidentes de las juntas parroquiales, los alcaldes y prefectos conocen lo que pasa en los territorios.
La autoridad provincial citó un tuit de la alcaldesa de Ibarra, Andrea Scacco, al que calificó de contundente, en el que le contestó a Moreno: “Imagino que a usted no le importan los ibarreños; a diferencia de lo que yo pienso, mi obligación es precautelar la vida de los ibarreños”.
A criterio de la prefecta Pabón, sin duda, la mejor decisión en Pichincha fue mantener el semáforo en rojo, más aún, cuando los casos de contagio con el virus de la pandemia están lejos de estabilizarse, como señaló el ministro de salud, refiriéndose al país en términos generales, manifestó.
“Al contrario, estamos en una curva de crecimiento; los datos reales se asemejan mucho a las prospecciones que hicimos. Siempre dijimos que entre el 15 y 20 de mayo tendríamos la curva más alta. Y esto lo estamos sintiendo en la provincia”, alertó.
Citó casos como el de Pedro Moncayo, que dijo le preocupa mucho por el crecimiento exponencial en parroquias como La Esperanza. El crecimiento de casos en los cantones Mejía y Rumiñahui. Sostuvo que esta realidad le hace comprender que la decisión de los alcaldes de Pichincha fue la acertada.
La prefecta manifestó que no desconoce la situación económico difícil que atraviesa el país, Pichincha y la capital de la República. Por ello, insistió en que mayo tiene que ser el mes para una salida exitosa de la etapa del aislamiento social al distanciamiento productivo.
Advirtió que, si no se mantienen las medidas de prevención, en los próximos días y semanas, se corre el riesgo de que el sistema sanitario colapse, como está a punto de suceder, porque cada vez hay menos disponibilidad de camas, de unidades de cuidados intensivos y de respiradores, en los hospitales. Y eso puede significar la muerte de muchos ciudadanos.