Además se requiere aclarar la situación jurídica del 40,14% de la población carcelaria que no tiene determinada su responsabilidad penal, agregó.

Karla Benitez, exviceministra de Atención a Personas Privadas de Libertad del exministerio de Justicia, señaló que la crisis carcelaria no se soluciona con más infraestructura como es la construcción de más Centros Penitenciarios, sino más bien con políticas públicas que se dediquen a la prevención, aunque aquello no resulte atractivo políticamente porque no es visible ni da réditos a largo plazo: “Que los niños accedan a salud, educación, que tengan un uso adecuado del tiempo libre, por ejemplo”.

De otro lado, también señaló la necesidad de que el Gobierno tome soluciones urgentes con la articulación de la mesa de la justicia con el fin de conocer lo que pasa con el 40,14% de población carcelaria a la que no se le ha determinado su responsabilidad penal.

Mencionó que mediante esas mesas, en el anterior régimen se logró articular con otras entidades del Estado para impedir que existan audiencias fallidas, para lo cual se establecieron videoconferencias: “Las audiencias fallidas disminuyeron de un 29.2% en 2012a 3.6% en 2016”.

“De la mano de esa situación jurídica se requiere una clasificación de los privados de la libertad, porque en los pabellones están todos juntos, se ha perdido el control al interior de los Centros pese a que la infraestructura mantiene espacios diferenciados”.

Lamentó que la reducción del presupuesto haya tenido incidencias importantes desde el año 2018 y que desbordaron a finales del mes de febrero de este año.

“Desde la semana pasada pudimos observar la ausencia de los controles penitenciarios, el mismo hecho de que sean los privados de libertad están haciendo requerimientos, ya denota que el control no era del todo cierto y ni efectivo”.

Mencionó que al final todo a derivado en que los crimines se estén dirigiendo desde el interior de las cárceles razón por la cual esa problemática ha aumentado en dos puntos.