Harry Anderson Echarry Narváez, de 24 años de edad, fue presentado ante el Ministerio Público por presuntamente haberle inyectado biopolímeros a una joven (22) durante una intervención estética efectuada en su lugar de residencia, ubicada en la parroquia Urimare del estado Vargas.

El fiscal 1° auxiliar de la referida jurisdicción, Jorge Crespo, acusó al hombre por la presunta comisión de los delitos de lesiones graves y comercialización de sustancias nocivas para la salud, previstos y sancionados en el Código Penal y la Ley Orgánica de Precios Justos.

Se solicitó la admisión de la acusación, el pase a juicio de Echarry Narváez y que se le mantenga la medida privativa de libertad en el Internado Judicial de San Juan de Los Morros, estado Guárico.

El 15 de julio de este año, la joven denunció ante la Unidad de Atención a la Víctima en el estado Vargas que Echarry le inyectó una sustancia a los fines de aumentar sus glúteos, sin embargo, a raíz de la citada intervención comenzó a padecer problemas de salud.

En el procedimiento, realizado el 19 de agosto, se le incautó material médico quirúrgico, entre ellos: inyectadoras, gasas y sustancias cuyo uso no está permitido por el Ministerio de Salud.

El Estado prohíbe el uso y aplicación de sustancias de relleno (biopolímeros, polímeros y afines) en tratamientos estéticos.