Fidel Araujo, militar retirado, acusado y sentenciado a 3 años de prisión por el delito de incitación a la rebelión en la fuerza pública el 30 de septiembre del 2010, día de la revuelta policial, cuestionó el reglamento para la otorgación del indulto que estará a cargo exclusivamente del presidente Rafael Correa.

Mediante decreto ejecutivo, el mandatario emitió reglas para la “concesión de indulto, conmutación y rebaja de penas”, previo informe del Ministerio de Justicia.

Para Araujo, este reglamento es una muestra más de la intervención del Gobierno en la justicia y “ahora se pone sobre la Constitución”.

“Yo no solicitaré el indulto, tampoco ofreceré disculpas al presidente(…), él es quien tiene que pedirme disculpas porque me acusó de haber sido un sicario señalando que hay un testigo protegido y luego ese testigo lo negó. Eso no puede venir del primer ciudadano de la patria, él me ha hecho un grave daño moral por cuatro años”.

Cuestionó que en su caso, a pesar de haber demostrado que no tuvo nada que ver con la revuelta policial, fue sentenciado a prisión por un delito que en el Código Orgánico Integral Penal (COIP) ya no existe.

“El 27 de agosto pasado presenté al juez nacional Jorge Blum Carcelén un pedido para que se extinga la sentencia argumentando que en el nuevo Código el delito por el que me condenaron ilegalmente, no existe, pero hasta ahora el juez guarda silencio”. Este procedimiento consta en los artículos 630 y 670 del nuevo Código.

El exlegislador opositor Fernando Balda fue uno de los primeros que se acogió a estos artículos para extinguir su pena porque la figura de injuria no calumniosa grave, por la que fue condenado, ya no existe.

Lo mismo hizo el exasambleísta Cléver Jiménez, acusado de hacer una denuncia maliciosa; en su caso se decidió rebajarle la pena de 18 a 12 meses de cárcel.

Luego de 4 años me consta que hay mucha presión en la Justicia. En mi caso hay una injerencia total del Ministerio del Interior y del Consejo de la Judicatura”.

Fidel Araujo, militar retirado.