Los sistemas operativos Linux siguen siendo una minoría frente a las grandes cuotas de mercado que ostentan Windows y macOS, pese a que su tasa de uso alcanzara por primera vez el 4,03% el pasado mayo, pero algunas tendencias recientes pueden continuar mejorando su popularidad. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

La enorme cantidad de distribuciones y versiones distintas pueden causar demasiada confusión en un primer momento, y en ocasiones su poca compatibilidad con algunos famosos programas creativos hacen que no muchos profesionales opten por un SO Linux para sus ordenadores. Sin embargo, algunos descontentos recientes unidos a la evolución del mercado apuntan a que este sistema operativo podría seguir ganando adeptos próximamente con el paso del tiempo.

Al final, los grandes programas profesionales de edición de vídeo, fotografía, diseño, creación musical o de otra índole, suelen crearse con Windows o macOS en mente, quedando la compatibilidad con Linux como un añadido al que no se le da tanta importancia. Pero, la preocupación reciente por la privacidad del usuario, la forzada inclusión de asistentes de IA y los altos precios del hardware de Apple o Microsoft, pueden animar a cada vez más público a optar por una alternativa que no solo es más barata, sino que también puede ser mejor en varios sentidos.

Grandes decepciones con Microsoft

Podemos hablar del accidentado despliegue de la herramienta Recall, que tuvo una pésima recepción por parte del público al suscitar mucha preocupación acerca de la seguridad de los datos confidenciales de los usuarios. Pero también de la inclusión de Copilot como asistente de Windows, o el aderezo de todo el sistema operativo con espacios publicitarios camuflados como recomendaciones, que suponen una distracción no solicitada para el usuario. Y lo cierto es que no son las únicas decepciones que se han ido dando en los últimos tiempos por parte de la empresa encargada de Windows.

Es por ello por lo que, por ejemplo, llamó tanto la atención la versión limpia de Windows para instituciones públicas que se conoció en redes hace unas semanas; los usuarios desean un sistema operativo ligero, sin aplicaciones preinstaladas no deseadas y, en definitiva, sin tanto bloatware e intromisión por parte de Microsoft. Linux, por el contrario, con su filosofía open-source, presenta sistemas operativos que se centran en cumplir las necesidades de los usuarios, sin mayor interés en obtener más ingresos de él con publicidad o servicios extra.

Los ordenadores de Apple, demasiado caros

Aunque macOS sigue siendo un sistema operativo extremadamente deseado por lo bello de su estética visual, y por su potencia y fluidez, hay un problema que no parece que vaya a resolverse en ningún momento: el precio que hay que pagar por sus ordenadores. Y es que parece que no va a llegar el día en que la empresa californiana decida sacar al mercado dispositivos más asequibles, como han ido haciendo a lo largo de los años otras marcas. Incluso el MacBook Air más básico, con 8 GB de RAM (que ya es bastante poco para lo que muchas veces necesitamos hoy en día) y pantalla de 13 pulgadas, sobrepasa los 1.000 euros de precio. Por lo que, sin duda, el coste es el peor enemigo de muchos usuarios.

Comprar un ordenador sin sistema operativo e instalarle una distro de Linux va a ser múltiples veces más barato, incluso si optamos por comprar un PC que ya tenga un Linux preinstalado. Los ordenadores de Microsoft, por otro lado, aunque suelen ser más baratos que los de Apple, tampoco son precisamente baratos si buscamos optar por uno con una buena tarjeta gráfica, holgado espacio de almacenamiento en disco duro y suficientes gigas de memoria RAM. La actual situación económica aprieta el bolsillo de todos, y más personas pueden empezar a abrir los ojos ante alternativas funcionales y menos costosas.

Oasis para los que odian la IA

A diferencia de Windows, con su Copilot, de los Android con Gemini de Google o de los dispositivos de Apple con la llegada de Apple Intelligence, las distribuciones de Linux no están incorporando asistentes de inteligencia artificial por defecto en sus sistemas. Hay un gran número de personas que está harta de ver la IA hasta en la sopa, y buscan un sistema que no intente todo el rato incitarles a usarla para poder usar sus datos para seguir entrenándola. Un Linux te libera de todo esto, sin evitar que puedas usar una IA en el momento específico en el que lo desees instalándola tú mismo o usando una plataforma online como la de ChatGPT.

Mayor privacidad

Desde siempre, el sistema operativo open-source se considera mucho más respetuoso con la privacidad del usuario que Windows, que trata de obtener el máximo de datos posible del usuario para seguir generando ingresos extra con el tiempo. Aunque pueda requerir un nivel un poco más alto de conocimientos informáticos, los usuarios de Linux pueden personalizar más sus sistemas y usarlos como quieran, en lugar de que sea el ordenador el que se aproveche del uso del usuario.

Existen además varias distros especialmente enfocadas en la privacidad online, como Tails, Kodachi, Qubes OS o Septor.

Rapidez y fluidez

La comunidad de fanáticos y programadores de Linux, entregados a su labor incluso sin cobrar nada o poco debido a su respeto por la filosofía open, hacen que el kernel de Linux mejore constantemente y que los errores que van detectándose se corrijan al instante con nuevas actualizaciones. Aunque al principio uno puede sentirse más desprotegido con un Linux debido a que menos personas a nuestro alrededor lo usan, en Internet podemos encontrar cientos de páginas y foros en las que consultar nuestras dudas y aprender a hacer cualquier cosa. Al final, esto no va a ser un problema para aquellos que tengan curiosidad y a los que les interese aprender cosas nuevas sobre informática todos los días, aunque es innegable que sí puede resultar molesto para aquellos que simplemente quieren hacer una tarea rápido sin preocuparse por lo que ocurre detrás de bambalinas.

Hay multitud de distros de Linux muy usadas en ordenadores viejos, precisamente por lo veloces que son incluso con bajos recursos. También hay distros orientadas a los videojuegos, para maximizar al máximo la compatibilidad, distros pensadas para la programación, y otras muchas para diferentes casos de uso. El abanico de opciones es muy amplio.