El negocio de los mini influenciadores

Los debates son constantes en internet. En las cuentas de estas minicelebridades sus padres son constantemente cuestionados por exponer a sus hijos temprana edad.

Tres expertos hablaron con Extra para señalar su opinión sobre este tema.

El magister en marketing digital, Adrian Burgos, explica que el influenciador se utiliza como un medio más para la publicidad. Al tener impacto en sus seguidores cualquier marca resulta interesada.

En el caso de las niñosinfluenciadores, Burgos señala que su éxito también radica en la identificación con sus seguidores. “Muchas madres, por ejemplo, siguen a un niño porque lo consideran un modelo, por como se viste o porque tiene una empatía con él”. Es decir que todo radica en la audiencia y en la estrategia que maneja la marca.

La estrategia tiene que ir conectada con la marca. “Si una marca considera un influenciadorniño es un canal ideal, y esto no afecta al niño, a la publicidad y a la audiencia, en concepto general está bien”, indicó. Sin embargo hace una aclaración que, en el caso de emplear niños, todo depende del fin y la estrategia de la marca.

Para el experto, la cualidad más importante de un influenciador es ser auténtico, y en el caso de los menores, los padres son quienes los llevan a actuar de cierta manera.

Burgos al tomar su postura como padre indica que —en su caso— le daría miedo que publicarinformación de su hija y “volverla famosa” sin su consentimiento. “Mi hija estaría expuesta a un desconocido detrás de una computadora”. Él no lo haría ya que hasta cierto punto lo considera como explotación.

Marcel Pazos, también experto en marketing digital, aclara que un ‘influencer’ debe tener visibilidad, vigencia y empatía. Luego se señalar estas cualidades, su postura sobre los mini influenciadores sale a relucir. Pazos dijo que respeta esta forma de negocio pero que no la comparte. Luego de una analogía con los niños famosos de Hollywood, señaló que desde su punto de vista “los padres deben asumir la responsabilidad de compartir imágenes o información de un menor a la red”.

Indicó además que al momento de compartir información en redes no se sabe qué tipo de uso se le puede dar, aunque sea una campaña enfocada a un grupo determinado de personas la información en internet está al alcance de todos.

Pero aquí entra el otro lado de la moneda. La estrategia de emplear niños en campañas publicitarias sí resulta beneficiosa para las marcas.