Dos jóvenes retoman la venta de leche de chiva en Esmeraldas

Esmeraldas –

La recuperación de asma de una sobrina de Jairo Arroyo con leche de chiva, lo motivó a vender esta leche en Esmeraldas, que para muchos es curiosidad ver los cabritos caminar por la ciudad o extraer el producto de sus ubres.

Por lo costoso del viaje y comprar la leche en otra ciudad, decidieron comprar una chiva y desde hace un año, junto con su amigo Gabriel, decidieron por este emprendimiento.

Son 9 cabras de color negro que las crían en la parroquia San Mateo, desde donde las trasladan todos los días en una camioneta a la capital esmeraldeña.

La jornada de trabajo inicia desde las 06:00 hasta las 16:00 que recogen los animales, al igual los excrementos y dejan limpio el lugar donde se parquean con las chivas.

Arroyo tiene a su cargo cinco chivas que le ha puesto identificación como Fronteriza, Chiquita, Mono Crudo, Mocha y Bienvenida, que fueron compradas en Manabí, mediante préstamo de dinero. En esa provincia aprendió el ordeño y cuidado de estos animales.

Los emprendimientos son alternativas para estos jóvenes que no se acomplejan arrear sus cabras y vender la leche en las esquinas asignadas por la Policía Municipal.

La comercialización de la leche chiva no se veía por años en las calles esmeraldeñas. (I)