“Me duele ahí abajo”, la confesión de un abuso

“Aquí está mi mami y él no nos hará nada, Santiago, no nos hará nada”. La imagen de su niña de cuatro años abrazando un bebé de juguete, como protegiéndolo, parte el alma de Gloria (nombre protegido).

Era un jueves en la tarde cuando su hija regresó de la escuela, donde cursa el kinder, y le expresó que le dolía “ahí abajo”. Gloria pensó que su niña se había golpeado.

Intentó darle el almuerzo, pero apenas y tomó un par de cucharadas de sopa y se acostó a dormir. Luego, al intentar bañarla, la pequeña se quejó de un fuerte dolor. No le quiso decir nada, pero su actitud callada y pensativa alertaron a la mujer.

Al día siguiente, Gloria descubrió la horrible verdad: su hija habría sido abusada.

Fue justo cuando lavaba la ropa de la pequeña que notó una mancha de sangre en el interior. Al interrogarla, la niña le confesó “el secreto”: Él (un chico) le había tocado con los dedos, cuando fue al baño.

Con la confesión, la menor de edad se puso a llorar y pidió ya no ir a la escuela.

“Llamé al papá y fuimos a reclamar a la institución pero no nos dieron respuesta”, manifestó Gloria.

Ella puso la denuncia en la Fiscalía del Guayas para que se investigue el caso. Supuestamente el informe médico reveló que hubo manipulación en las partes íntimas de la niña.

“Destrozaron toda la infancia de mi hija. Ella quería ser doctora, ahora solo llora. Tiene pesadillas y no quiere estudiar”.

(AVB)

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EXTRA acudió a la institución donde estudiaba la niña, pero nadie atendió a la puerta.